Rueda de las emociones
¡Hola! 🙋♀️ ¿Alguna vez has sentido una mezcla de emociones que te resultan difíciles de entender? La vida es una mezcla de emociones, desde felicidad hasta tristeza. A veces, estas emociones se entremezclan y nos resulta difícil entenderlas. Esta es la razón por la que hemos desarrollado la "Rueda de las emociones", una herramienta que nos ayuda a identificar y comprender nuestras emociones.
¿Qué es la Rueda de las emociones?
La "Rueda de las emociones" es una herramienta que nos permite identificar y comprender mejor nuestras emociones. Esta rueda se divide en seis categorías principales: felicidad, tristeza, miedo, enojo, sorpresa y desagrado. Estas seis categorías principales se dividen a su vez en subcategorías más específicas, como por ejemplo: en la categoría de felicidad podemos encontrar el entusiasmo, la satisfacción y la gratitud.
El modelo circular o en 2ª dimensión es la más conocido (de ahí que se haya popularizado como “rueda”), y se utiliza para entender las emociones básicas y sus posibles combinaciones. Veámoslo a continuación.
El modelo cónico.
En 1980, el creador de la rueda de las emociones Robert Plutchik, desarrollo las imágenes circular y cónica para explicar la “Teoría Psicoevolutiva de la Emoción”. Veamos a continuación el modelo cónico utilizado como formato 3d para explicar su teoría.
¿Cómo funciona la rueda de las emociones?
La rueda de las emociones funciona en base a una relación esquematizada entre las distintas emociones, las cuales describe siguiendo 3 criterios:
- Tipología: agrupándolas en emociones básicas y compuestas.
- Antagonismo: de acuerdo al grado de similitud o discrepancia entre ellas.
- Intensidad: conforme al nivel de excitación con que pueden experimentarse.
Plutchik tomó las propiedades de los colores, como analogía para estudiar y explicar la forma en que las emociones se combinan unas con otras.
Como en los colores primarios, la mezcla de emociones básicas da lugar a emociones compuestas, que su vez, tienen distintas tonalidades o matices.
La concepción de esta analogía con los colores, resulta fundamental para entender cómo utilizar la rueda de las emociones de forma práctica.
1. Tipología
Para comprender su funcionamiento, este criterio es el punto de partida (y el más fácil de entender), ya que parte de una conceptualización muy sencilla.
Como ya mencionamos, Plutchik clasificó las emociones en 2 grandes grupos: emociones básicas y compuestas, o primarias y secundarias.
Las 8 emociones básicas son: Alegría, Tristeza, Miedo, Ira, Confianza, Asco, Sorpresa y Anticipación, y las emociones compuestas serían todas las demás.
Estas emociones básicas, podemos ubicarlas en la circunferencia subsecuente al círculo central (alrededor del “núcleo”) de la rueda.
2. Antagonismo
Plutchik afirma que las 8 Emociones Básicas (cuya combinación da origen todas las demás), pueden ser agrupadas en 4 pares de polos opuestos:
- Alegría es antagónico de Tristeza.
- Miedo es antagónico de Ira.
- Confianza es antagónico de Asco.
- Sorpresa es antagónico de Anticipación.
Entre estas emociones opuestas existen varias etapas o “emociones intermedias” que las separan gradualmente, y se asemejan en mayor o menor medida, de acuerdo a su grado de separación.
La relación de similitud o antagonismo entre las emociones, se ubica en el área de intersección entre los “pétalos” diametralmente opuestos y los límites de cada circunferencia.
3. Intensidad
En este criterio el nivel de excitación de las emociones y sus transiciones, están representadas por la gradualidad de los colores en cada “pétalo”.
De tal forma, que mientras una emoción se encuentra más cerca del núcleo, su color será más oscuro (emociones intensas) y mientras más lejos, su color será más pálido (emociones contenidas).
Por ejemplo: en el centro de la rueda, el azul oscuro que representa la Aflicción, cambia a un azul tenue indicando que la Tristeza, está disminuyendo en intensidad respecto a su antecesora.
¿Pará qué sirve la rueda las emociones?
Su utilidad como recurso de análisis emocional es sumamente interesante y valioso, ya que permite observar el curso de las emociones de manera visual.
Revelando el estado inicial de cada emoción (como se originan), su trayectoria (combinación o intensidad), hasta su función u objetivo último.
Es decir, la rueda de las emociones nos ayuda a:
- Identificar las emociones.
- Detectar los eventos que desencadenan las emociones.
- Expresar y usar las emociones asertivamente.
- Encontrar conductas alternativas para satisfacerlas.
- Entender y empatizar con las emociones de los demás.
Cuando entendemos lo que sentimos y por qué lo sentimos, somos capaces de gestionar mejor nuestros impulsos, y dar un sentido a lo que nos sucede.
Al final, una mejor comprensión emocional, se traduce en una mayor claridad ante la solución de problemas y la forma en que reaccionamos ante ellos.
Específicamente, la aplicación práctica de la rueda de las emociones suele darse en 3 grandes áreas de la psicología:
- Psicología Educativa, como contenido de aprendizaje y herramienta pedagógica.
- Psicoterapia, como recurso de autoconocimiento o con fines de orientación clínica.
- Psicología Laboral, para el adiestramiento de personal y el análisis del clima organizacional.
¿Cómo usar la Rueda de las emociones?
La Rueda de las emociones es una herramienta muy útil para ayudarnos a comprender mejor nuestras emociones. Esta herramienta nos permite identificar nuestras emociones y comprenderlas mejor. A continuación, te explicaremos cómo usar esta herramienta.
Paso 1: Identifica tus emociones.
El primer paso para usar esta herramienta es identificar tus emociones. Esto significa que debes reconocer cuáles son las emociones que estás sintiendo en el momento. Para hacer esto, debes tomar un momento para pensar en cómo te sientes. Esto puede ser difícil para algunas personas, así que es importante tomarse el tiempo necesario para identificar sus emociones.
Paso 2: Ubica tus emociones en la Rueda de las emociones.
No cabe duda que el día a día es como la rueda de las emociones, a diario las experimentamos, pero no siempre las comprendemos. En los últimos años, los científicos parecen haber dejado atrás el culto a la inteligencia intelectual, para estudiar las emociones con especial interés. Y es que, anteriormente, se atribuía la habilidad de resolver problemas únicamente a la inteligencia intelectual y al famoso IQ o Coeficiente Intelectual.
Pero ahora, gracias a diversos estudios, sabemos que la gestión emocional es una pieza clave, que interviene no sólo en el conocimiento, sino en su aplicación directa.
Antes de iniciar con la guía de la rueda de las emociones, me gustaría hacerte una sencilla pregunta: ¿CÓMO TE SIENTES?… analízalo, ¿Cuál es tu respuesta?
¿Cómo responde la mayoría a esta simple pregunta? generalmente con respuestas muy escuetas, del tipo: “bien”, “cansado”, “mejor”, “déjame”, “nada”.
A pesar de ser una pregunta muy simple, las respuestas más comunes reflejan un gran desconocimiento de las propias emociones o bien, una evasión de las mismas.
La pregunta alude a un estado emocional reciente, no a lo que hago, ni lo que tengo, ni en donde estoy, o lo que quiero que hagan por mí…
¿Qué tanto sueles “auto-aplicarte” estas respuestas (estoy bien, cansado, no sé qué tengo, etc.), evadiendo lo que sientes o dejando con más dudas a tu interlocutor?
Si es tu caso, o simplemente deseas desarrollar más tu conciencia emocional, en hora buena, que aquí aprenderás una poderosa herramienta para identificar y comprender tus emociones.
Las Díadas Emocionales
Cada posible combinación de las 8 emociones básicas, dan como resultado 24 emociones compuestas, que Plutchik clasificó en 3 grupos de díadas.
Cada grupo representa los grados de separación con las emociones básicas, de tal forma que la posibilidad de experimentar emociones de la díada 1, 2, y 3 disminuye a medida que su separación aumenta.
Función de las emociones según Plutchik
Para Plutchik cada emoción tiene “una razón de ser”, funciones muy concretas que las distinguen y permiten la supervivencia del individuo en su ambiente.
Según su modelo secuencial, las emociones se activan ante la exposición a estímulos específicos, lo que su vez desencadena las denominadas conductas de supervivencia (Krohn, 2007).
Es decir, las emociones no son ni buenas ni malas, sino necesarias. Y se activan instintiva e inconscientemente para generar comportamientos que aseguren nuestro bienestar.
Para Plutchik cada emoción (y sus combinaciones) pueden generar diversas conductas de supervivencia:
- DEFENSA, protección y huida » generada por Miedo y Terror.
- DESTRUCCIÓN, de un obstáculo » generada por Ira y Rabia.
- INCORPORACIÓN, ingesta de alimentos » generada por Confianza.
- RECHAZO, como respuesta a material dañino » generada por Asco.
- REPRODUCCIÓN, intercambio genético » generada por Alegría y Placer.
- REINTEGRACIÓN, como respuesta a la pérdida » generada por Tristeza y Dolor.
- EXPLORACIÓN, del entorno » generada por Curiosidad y Juego.
- ORIENTACIÓN, como respuesta a lo desconocido » generada por Sorpresa.
Nuestro cerebro es emotivo, reacciona emocionalmente a los estímulos, liberando sustancias que nos ayudan a tener un comportamiento acorde a lo que experimentamos.
Si el estímulo persiste, la reacción emocional puede mantenerse, disminuir, eliminarse o combinarse con otra emoción a fin de cumplir su función de supervivencia.
Si no podemos reconocer nuestras propias emociones, tampoco podremos comunicarlas con asertividad. A esta habilidad le llamamos reconocimiento de emociones.
Por lo tanto, visto desde un punto de vista emocional, la vida puede ser muy rica, nutritiva y variada ¡Tenemos todo un “menú” a nuestra disposición!
Plutchik nos legó 8 emociones básicas: Alegría, Tristeza, Miedo, Ira, Confianza, Asco, Sorpresa y Anticipación, que deberíamos aprender a reconocer y utilizar.
La mayoría de los animales pueden experimentar las emociones básicas, sin embargo, los humanos podemos generar muchas emociones más: las emociones compuestas.
¿Cuáles son las emociones que más sueles experimentar?, ¿De que manera reaccionas ante ellas?, ¿Conoces los estímulos a los que reaccionas con más intensidad?…
Sí dedicas un tiempo a conocerte a ti mismo seguro que encontrarás muchas formas de canalizar mejor tus emociones. ¡Además, es un proceso que resulta muy divertido!
Si estas buscando un formato de la rueda de las emociones para imprimir te lo dejo a continuación:
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Muy buena información para saber mas para seguirnos informando sobre este plan felicidades